¿Cómo ayudar a un familiar o amigo con depresión?

Cuando la depresión aparece en las personas que más queremos: ¿Cómo puedo ayudar?

 Depresión, trastorno psicológico

A veces sucede que convivimos con un trastorno psicológico de manera indirecta, porque es un allegado o ser querido la persona que lo está sufriendo. Dentro de los trastornos psicológicos en adultos, es la depresión uno de los más frecuentes dentro la población mundial, y por ello es muy habitual que conozcamos a alguien que esté pasando por este momento tan duro.

Es normal que ante esta situación no sepamos qué hacer, cómo reaccionar o incluso que nos frustremos porque nos desborde la preocupación hacia la otra persona. Por eso, el primer paso es identificar si la persona qué está pasando y en segundo lugar, saber cómo podemos ayudar.

¿Cuál son los síntomas en una depresión?

Aunque ya lo hemos comentado en otros post anteriores, nos gustaría recordar cuáles son los síntomas que suele presentar la depresión:

  • Estado de ánimo irritable o bajo la mayoría de las veces
  • Dificultad para conciliar el sueño o tener un exceso de sueño
  • Cambios en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso
  • Cansancio y falta de energía
  • Sentimientos de inutilidad y/o culpa
  • Dificultad para concentrarse
  • Inactividad y/o desinterés por las actividades habituales
  • Sentimientos de desesperanza
  • Pensamientos repetitivos de muerte o suicidio
  • Pérdida de placer en actividades placenteras, incluyendo la actividad sexual.

La depresión no es un trastorno único, existen varios tipos de depresión y tampoco se presenta de la misma forma en niños que en adultos. Por ello, el primer paso consiste en animar a la persona a la persona a  que acuda a un especialista psicólogo para que lleve a cabo la evaluación y el tratamiento adecuado.

Consejos útiles por profesionales psicólogos

El siguiente paso consistiría en saber cómo actuar frente a esta situación y para ello, los profesionales de Clínica La Serna, psicólogos con sede en fuenlabrada, queremos a facilitar una serie de pautas que pueden ser útiles para ayudar a la persona que está pasando por este momento tan difícil:

 

  1. Sé empático: la persona que está pasando por este proceso, tiene una visión del mundo muy distinta que las personas que no lo padecen. Estar deprimido o no, no es una cuestión de voluntad, por ello no hay que presionar a la otra persona para que cambie su estado de ánimo porque en ese momento no lo hace porque no quiere, es porque no puede.
  2. Hablad de cómo se siente: a todos nos gusta ser escuchados cuando tenemos un problema, en este caso, se hace fundamental que la persona tenga un hombro en el que apoyarse. No hace falta que ofrezcas soluciones a sus problemas si no las tienes, muchas veces ser escuchado es ya una cura de por sí.
  3. Ponte en su lugar: bajo esta situación, sentirse comprendido por el entorno ayuda muchísimo a la hora de salir de este trastorno. Por eso, es importante que no se culpabilice, ni se trate como a un niño ni que se haga sentir inútil a esa persona. Simplemente hay que darle el trato que necesita, como a un adulto que está pasando por un momento difícil.
  4. Anímale a llevar a cabo las recomendaciones del psicólogo: tener un apoyo que ayude a llevar a cabo los ejercicios y las indicaciones, puede resultar muy favorable a la hora de darle un empujón a la terapia. Si la persona está tomando medicación para ayudar a resolver este problema, es muy importante que lleve a cabo las pautas que le haya indicado su psiquiatra.
  5. Ayúdale a aumentar su nivel de actividad: depende de cómo se encuentre la persona, tendrá un mayor o menor nivel de actividad. Puedes animarle a que haga ejercicio o simplemente acompañarle a dar un paseo. El ejercicio es un coadyuvante natural del tratamiento contra la depresión. Si en un principio la persona lo rechaza, no le presiones. A medida que vaya avanzando el tratamiento, seguro que se va animando cada vez más hacia la realización de actividades.
  6. Intentar ayudarle a encontrar las posibles fuentes de estrés: para resolver un problema, es fundamental llegar a la raíz. Puede ser que no haya tenido la oportunidad de hablar sobre qué es aquello que le produce estrés o le preocupa. Como ya hemos dicho, la mayor ayuda que podemos ofrecer en este caso, consiste en escuchar a la otra persona.
  7. Si existen pensamientos suicidas, hablar abiertamente sobre ello: la depresión es un trastorno que presenta gravedad debido a que algunos pacientes muestran ideas o pensamientos suicidas. No hay que asustarse, simplemente podemos preguntarle por qué piensa así y qué podemos hacer nosotros para ayudarle. En este caso es muy importante, que comuniquemos al psicólogo que esté realizando la terapia, la existencia de dichos pensamientos, para que lleve a cabo las estrategias terapéuticas más adecuadas.

 

La depresión es un trastorno que hay que tomar muy en serio. Resulta muy incapacitante para aquellas personas que lo padecen y por ello resulta de gran ayuda apoyar a las personas que lo sufren. Si conoces a alguien que esté pasando por ello y te surgen más dudas sobre cómo ayudar, el equipo de psicología de Clínica La Serna, está a tu entera disposición.

 

¿Qué podemos hacer por ti?. Seleccionamos el mejor tratamiento psicológico

Tomar decisiones requieren de un esfuerzo mental

Cada vez que adquirimos o elegimos algo como puede ser el colegio de nuestros hijos, un banco u otro para pedir un préstamo, o simplemente comprar el último teléfono que ha salido al mercado; buscamos lo mejor, lo que se adecúe a nuestras necesidades, aquello que cumpla con nuestras expectativas y sobre todo, aquello que nos proporcione la seguridad de que hemos elegido bien.

Siempre nos surgen muchas dudas y solemos mirar, comparar o preguntar a personas expertas o cercanas para que nos aconsejen sobre qué es lo mejor y/o cuáles son o han sido sus experiencias, con aquello que vamos a elegir.

Salud Mental

En el caso de nuestro bienestar y la salud mental este tipo de elección es incluso más importante, asesorarnos sobre a quién podemos acudir para poder resolver nuestros problemas o los de nuestros hijos, pareja, etc, cobra una gran importancia. Decimos que es más importante todavía porque, nos vamos a “abrir” a una persona que no es de nuestro entorno, para que nos ayude a resolver nuestras dificultades.

En este caso, se le añade un coste personal que no siempre es fácil de asumir por ello, desde Centro de Psicología Clínica La Serna, queremos contarte en qué nos tenemos que fijar a la hora de elegir una clínica de psicología para llevar a cabo una terapia psicológica.

Terapias Psicológicas

En primer lugar queremos decirte que es fundamental  saber lo que queremos y lo que no. En el caso de las terapias psicológicas, necesitamos la confianza de saber que la terapia que vamos a realizar es eficaz y que está construida desde la profesionalidad y el aval científico.

Pseudo-terapias

Por ello tenemos que tener cuidado ya que, nos podemos encontrar con muchas pseudo-terapias que nos prometen los mejores resultados sin un respaldo científico que las avale. Por ello hay que ser muy cauto a la hora de elegir ya que, si es la primera vez que llevamos a cabo un tratamiento psicológico, puede ser que los resultados obtenidos no sean los mejores y no queramos saber nada sobre terapias psicológicas, haciendo que esto suponga un perjuicio para nosotros o para nuestro entorno .

Por otro lado, resulta importante, que estas terapias utilizan las últimas técnicas disponibles para mejorar el estado de cada paciente. Al igual que sucede en medicina, la psicología está provista de un trabajo de investigación muy potente que permite ofrecer a los personas una mejora en su proceso terapéutico, haciendo que las terapias sean cada vez más eficaces.

En el equipo de profesionales psicólogos de clínica La Serna, nos preocupamos por nuestros pacientes, nos gusta ayudar a las personas ya que, nadie elige encontrarse mal. Por eso, queremos dar a soluciones a los problemas de las personas que nos solicitan ayuda, ofreciendo una garantía de profesionalidad.

Con más de 30 años de experiencia, en Clínica La Serna, trabajamos con las últimas terapias avaladas por la Asociación Americana de Psicología (APA).

¿Qué es el APA (Asociación Americana de Psicología)?

La APA uno de los organismos más importantes en el ámbito de la psicología y la salud mental en el mundo.

La APA  se encarga de investigar y aprobar los tratamientos que tienen una eficacia real y que respetan los derechos de los pacientes.

Dentro del equipo Multidisciplinar de Clínica la Serna, nuestra formación es constante para poder estar al día de dichos avances, y así poder ofrecer terapias psicológicas de calidad.

Terapias de tercera generación

Un ejemplo de este tipo de tratamiento son las denominadas, Terapias de Tercera Generación que abarcan la terapia de Aceptación y Compromiso (ACT).

Estas terapias hacen hincapié en que existe:

  • Fusión cognitiva. Creer que pensamiento y realidad son lo mismo.
  • Evitación experiencial. Evitar las experiencias que nos ofrece la vida incluyendo las negativas.
  • No poseer metas y valores. Por ejemplo por nuestros miedos o limitaciones, podemos no estar aprovechando nuestro potencial.
  • No llevar a cabo las conductas necesarias que nos acerquen a nuestros objetivos vitales o ser rígidos en las mismas. ¿Qué es lo que me paraliza? ¿Por qué terminó actuando de la misma manera a pesar de que siempre obtengo el mismo resultado?

Terapia Cognitivo- Conductual

Por otro lado, nuestro enfoque también se centra en la Terapia Cognitivo- Conductual que se caracteriza por trabajar desde la conducta y el pensamiento.

 La Terapia Cognitivo- Conductual nos permite:

  • Actuar en el “aquí y ahora”
  • Trabajando tanto dentro como fuera de consulta para dotar a nuestros pacientes de herramientas para situaciones futuras.
  • Es un tipo de terapia breve con el cual se consiguen cambios duraderos y sencillos donde se actúa directamente sobre el problema a través de las diferentes técnicas que se enseñan dentro de este marco terapéutico.
  • Paciente y terapeuta, se comunican y trabajan activamente en el proceso.

Teniendo en cuenta este marco terapéutico, desde Clínica la Serna nos encargamos de ofrecerte los últimos tratamientos para problemas de ansiedad, depresión, problemas de pareja, problemas de autoestima, problemas de tipo sexual, habilidades sociales, problemas con la conducta alimentaria entre otros, dentro del ámbito de la Psicología de Adultos.

También tratamos problemas desde el campo de la Psicología Infantil y todo ello con profesionales especializados, adaptándonos a las necesidades, ritmo y situación de cada paciente.

 Por ello, si estás pasando por un mal momento y crees que es el momento de tomar las riendas de tu vida, te invitamos a conocernos visitando nuestra página o contactando con nosotros, porque estaremos encantados de escucharte.

 

Habla Ahora con un Experto Psicólogo

Nuevas adicciones: El mal uso de las nuevas tecnologías

Gracias a Internet, estamos provistos de una fuente inagotable de información, entretenimiento y comunicación social. Si observamos a nuestro alrededor, podemos ver cómo todo el mundo hace uso de su teléfono móvil en cualquier lugar y a cualquier hora. Cualquier instante es bueno para mirar nuestras redes sociales, mail o las últimas noticias. Lo malo de ello es que pasemos gran parte de nuestro tiempo mirando nuestro teléfono o que nos sintamos ansiosos si por algún casual, se nos ha olvidado el teléfono en casa. En este caso, nos podemos encontrar con lo que se denomina adicción a las Nuevas Tecnologías (TIC). Como todos los problemas que se encuentran en clínica, es fundamental detectar cuáles son las señales de alarma y su gravedad.

 

¿Cuáles son los síntomas de una dependencia a las nuevas tecnologías?

 

Según Young (2008) los síntomas de dependencia a las Nuevas Tecnologías serían los siguientes:

  • Privarse de sueño (menos de 5 horas) para estar conectado a la red, a la que se dedica unos tiempos de conexión anormalmente altos.
  • Descuidar otras actividades importantes, como el contacto con la familia, las relaciones sociales, el estudio o el cuidado de la salud.
  • Recibir quejas en relación con el uso de la red de alguien cercano, como los padres o los hermanos.
  • Pensar en la red constantemente, incluso cuando no se está conectado a ella y sentirse irritado excesivamente cuando la conexión falla o resulta muy lenta.
  • Intentar limitar el tiempo de conexión, pero sin conseguirlo, y perder la noción del tiempo.
  • Mentir sobre el tiempo real que se está conectado o jugando a un videojuego.
  • Aislarse socialmente, mostrarse irritable y bajar el  rendimiento en los estudios.
  • Sentir una euforia y activación anómalas cuando se está delante del ordenador.

En resumen, en Clínica La Serna sabemos que el problema no solo reside en el número de horas que estamos conectados a Internet, sino también en el grado en el cual el uso de las Nuevas Tecnologías está influyendo en nuestra rutina diaria Si dejamos de relacionarnos con nuestro entorno por estar conectados, si no podemos acabar con nuestras tareas diarias o interfiere en áreas como el trabajo o incluso empieza a afectar a nuestro autocuidado (faltas de hora de sueño, por ejemplo) tendremos que tomar medidas para regular el uso de las TIC. Normalmente  Además de la interferencia diaria, otros síntomas que pueden aparecer son lo que se denominan síndrome de abstinencia y tolerancia. En el caso de las TIC, el síndrome de abstinencia se puede presentar como irritabilidad, depresión y ansiedad. En el caso de la tolerancia, podremos ver cómo cada vez necesitamos ir aumentando más y más el número de horas que “necesitamos” para reducir nuestra ansiedad de estar conectados.

 

¿Cómo tratar este tipo de adicción?

 

Como cualquier adicción, en primer lugar hay que ser consciente de que existe un problema. Una vez que sabemos que algo no va bien y que esta situación nos está generando malestar desde Psicólogos- Fuenlabrada, recomendamos acudir a un especialista que nos ayude a dar los pasos necesarios para poder regular la conducta. En un principio puede parecer que no hace falta acudir a un psicólogo porque creamos que “lo tenemos controlado” pero, en el caso de las adicciones, es necesario seguir una estrategia concreta pautada por un profesional, ya que esa sensación de control no suele ser real.

 

Por ello, en Clínica La Serna podemos asesorarte para solucionar este y otros problemas, de la mano de nuestros profesionales que cuentan con más de 25 años de experiencia.

 

Los límites en la educación

NO SÉ DECIRLE “NO”: LA IMPORTANCIA DE LOS LÍMITES EN LA EDUCACIÓN.

 

Cómo educar (bien) a nuestros hijos, es la gran incógnita que se nos plantea cuando decidimos embarcarnos en la aventura de ser padres. Suele suceder que la pregunta “¿Lo estaré haciendo bien?” nos acompaña durante todo este proceso, desde el momento en que nacen hasta que se convierten en adultos. Y es que como se suele decir, los niños deberían venir con un libro de instrucciones.

Psicología. Actitud en la educación de un hijo

Son muchas las preocupaciones que nos llegan a Clínica-La Serna, con respecto a la actitud que tomar a la hora de educar a los hijos, o como se conoce en Psicología, con respecto al estilo educativo que debemos adoptar con ellos. La respuesta a estas preocupaciones es que, como todo en la vida, situarnos en los extremos puede ser perjudicial y más en este caso ya que, es una tercera persona la que está aprendiendo de nuestra mano a desenvolverse en el mundo, con la gran responsabilidad que ello supone. Hay que ser consciente que como padres, todo lo que hagamos con nuestros hijos, va a determinar su vida adulta.

Por ello, un padre que adopta un estilo educativo autoritario, puede parecer que sabe poner límites pero también puede producir que el niño perciba el mundo como un lugar intimidante, en el cual, solo puede conseguir sus objetivos si muestra una conducta sumisa.

Por el contrario, si somos muy permisivos, el niño se puede convertir en un pequeño “tirano” con un autocontrol de la conducta muy bajo, aprendiendo que todo aquello que quiera conseguir, lo puede hacer a través de rabietas y exigencias. La clave de una buena educación es aquella que no se sitúa en un polo u otro, sino en aquella en la que ponemos límites con cariño y firmeza, es decir con un estilo educativo de tipo democrático.

El primer paso para realizar esta labor comienza por saber cómo aplicar los límites en la educación de nuestros hijos. Gracias a la aplicación de los límites, estamos mostrando al niño los principios básicos de convivencia social y por otro lado le estamos enseñando a protegerse de situaciones que podrían ponerle en peligro.

Recomendaciones como profesionales psicólogos

Nuestras recomendaciones desde Psicólogos-Fuenlabrada se pueden resumir en las siguientes:

  • Ser concretos con la conducta que queremos modificar. Este punto es clave para comenzar con el cambio de conducta. Si queremos modificar ciertas conductas del niño tendremos que ir haciéndolo de una en una. Decirle que es un desastre porque no recoge la habitación, genera una etiqueta que generaliza la conducta del niño y que puede dañar su autoestima. Es mejor acotar aquello que queremos cambiar para que el niño sepa en concreto que es lo que no está haciendo bien, con frases cortas y concretas.
  • Al igual que sucede con los adultos, imponer una norma, genera un bloqueo y una resistencia que da como resultado no hacer aquello que se nos ha impuesto. La mejor opción en este caso es darle al niño la libertad de elegir dentro de varias opciones que le podemos proponer. Esto no significa que el niño tome las riendas de su educación, sino que dentro de lo creemos que va a ser bueno para él, le vamos a dar nosotros las diferentes opciones para que pueda elegir, haciendo por un lado que nosotros le marquemos el camino a seguir y por otro que nuestro hijo perciba que tenemos en cuenta su opinión a la hora de tomar decisiones.
  • Ser firmes con lo que le queremos decir sin ser agresivos. Es fundamental decirle lo que queremos que haga con un tono de voz seguro, con seriedad y sin gritar. De esta forma, el niño entenderá que lo que le queremos decir es importante pero sin llegar a intimidarle.
  • Explicar el porqué de la conducta. Explicar por qué deben hacer algo o no hacerlo, hace que los límites cobren sentido. Darles una explicación breve de por qué no deben realizar una conducta, hace que interioricen esta norma como algo lógico y propio, lo que facilita que hagan caso a aquello que les estamos recomendando.
  • Reforzar la conducta bien hecha y/o modificada. Toda conducta que se premia (refuerza), se repite. En el caso de los niños es muy importante hacer hincapié en aquello que están haciendo bien ya que la atención es el reforzador o premio más potente para estos casos. Cuando el niño se esfuerza en cambiar y recibe una frase del tipo “Lo has hecho muy bien” o “Estoy orgulloso/a de ti”, no dudará en repetir esa conducta ya que, está recibiendo como premio, el cariño y la atención de las personas más importantes de su vida: sus padres.
  • Ser disciplinados a la hora de cumplir las normas. De nada sirve poner límites si unas veces se cumplen y otras no. Hay que cumplir siempre con el límite establecido y sobre todo y muy importante, que ambos padres estén de acuerdo y lo lleven a cabo de manera conjunta. Cumplir las normas de manera aleatoria o de manera unilateral (uno de los progenitores si las lleva a cabo y el otro no) hace que el niño no tome en serio la aplicación de los límites.
  • No poner etiquetas generales a la conducta del niño. “Eres malo”o“Que torpe eres” son afirmaciones que no solucionan el problema de los límites y perjudican seriamente  la autoestima del niño. El mensaje que le estamos mandando es que no son válidos, que no les queremos, etc.,  haciendo que el niño se sienta culpable o que siga comportándose igual porque se termina identificando con estas etiquetas. Esto da lugar a que piensen que da igual lo que hagan o como se comporten porque ellos son esa etiqueta que les hemos puesto y por eso, lo hacen.
  • Decir claramente “No”. Cuando una conducta concreta no va a beneficiar a nuestro hijo, es necesario decir “No”. En Clínica- La Serna, nos encontramos este gran problema. Hay padres que se sienten culpables por decir “No” a sus hijos bajo la creencia de que están siendo malos con ellos. Como hemos comentado al principio del post, estamos educando a futuros adultos y debemos enseñarles desde pequeños a aceptar una respuesta negativa ya que muchas veces en su vida adulta, se van a encontrar con esta situación. Aceptar el “No” desde pequeños, le va a enseñar a nuestro hijo a cultivar la paciencia, a respetar las normas de convivencia y esto va a asentar las bases del autocontrol de la conducta.

Siguiendo estas recomendaciones, estamos asegurando que nuestros hijos crezcan como personas seguras, independientes y autónomas. Es un proceso que implica mucha constancia pero si tenemos paciencia y no desistimos, disfrutaremos mucho durante el proceso y con el resultado final que es verlos crecer de una forma sana y feliz.

Si tienes alguna duda sobre cómo hacerlo no dudes en contactar con el equipo de Clínica-La Serna, estaremos encantados de poder asesorarte.

Pautas de higiene del sueño para niños

¡A dormir! Pautas de higiene del sueño para niños

Conseguir que nuestros hijos se vayan pronto a la cama y tengan un sueño reparador es fundamental para su rendimiento escolar y su estado emocional, ya que dormir bien influye directamente en su salud. A continuación os presentamos cuatro consejos que os ayuden a lograr que vuestros hijos se acuesten a una hora adecuada y descansen. Se trata de consejos generales que habrá que adaptar en función de la edad del niño/a.

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